sábado, 2 de abril de 2011

Viaje a India (y 5)

Ultimo día de circuito, nos levantamos pronto y sin desayunar nos vamos al poblado de pescadores de Konark, donde nuevamente haremos escenas de pesca al amanecer, esta vez con algo de niebla. En este lugar hay más barcas, más pesca y mucha más actividad que el dia anterior, puede ser un buen broche para cerrar el viaje.

Me empleo a fondo con mi panorámica y la Canon digital de sensor completo (la llamada "full frame", que manía con utilizar términos anglosajones). En este viaje he utilizado más la óptica de 24-105mm, esta vez a mi ojo le dio por ella. Después de fotografiar a los pescadores en su faena nos vamos a su poblado, que esta justo a pié de playa y vemos como viven, en pequeñas chabolas, son multitud. El guía nos dice que no nos separemos y no le gusta demasiado que ande por mi cuenta, sin embargo no siento nada de peligro, creo que a veces se pasa un poco controlándolo todo. Después de un buen rato nos vamos a desayunar a un hotel cercano, el nuestro está casi a 60 kilómetros de distancia y de nuevo volvemos a la playa para hacer algunas fotos más, ya la luz no es tan buena y acabamos después de tomar casi 500 imágenes, ya ésto se acabó, para mi aquí no hay más fotos, nuestro guía se empeña en que vayamos al Templo del Sol, es un lugar donde se positivamente que no hay imágenes interesantes, pero hace calor, la luz es mala y accedo en perder allí el resto de la mañana, luego vamos a Puri, me compro un pantalón  que me sirva para otros viajes y de paso acabar éste, aquí la ropa es bastantre barata y nos vamos a comer al mismo restaurante de ayer. Le damos la tarde libre y nos quedamos en el hotel preparando todo para el viaje de vuelta.

Al día siguiente vamos en dirección al aeropuerto, tenemos tiempo pues el vuelo no sale hasta las dos de la tarde, la mañana está con neblina y hay tiempo todavía de hacer algunas fotos inesperadas, aunque Sanatan está ansioso por llegar a su casa a Bhubaneswar y no hace más que insistir en que debemos estar a tiempo para no perder el vuelo, es el día de la Independencia de la India y dice que puede haber problemas con los terroristas.
Son las últimas fotos del viaje, apenas unas 100 en la corta mañana, pero con esta luz tan buena al final saldrá algo interesante, la luz siempre es lo mejor y lo único que el fotógrafo no puede controlar y en este país es difícil encontrar una buena luz.

Al final llegamos a casa de Sanatan donde nos presentó a su esposa, muy joven por cierto, nos llevó a comprar algunos regalos y de allí al aeropuerto, que estaba a diez minutos de la casa, todavía quedaban más de dos horas para salir, pero se ve que estaba ansioso por terminar el circuito.Nos esperaba una larga espera y luego en Delhi, recoger la maleta "perdida", todo un episodio del que hasta la fecha sigo sin recibir indemnización alguna, a la una de la madrugada salíamos para España, lo peor siempre son los viajes de vuelta, se hacen interminables, sobre todo por la larga espera en los aeropuertos.
Han sido  once días de circuito, unos 7000 disparos digitales, 20 rollos de película en formato panorámico, muchos kilómetros de carretera mala, pero una nueva experiencia de las que te marcan en la vida y ahora a revelar rollos, seleccionar y clasificar el trabajo, darle forma y dentro de algunos meses terminar con todo ésto y algún día publicar mi segundo libro de viajes, esta vez dedicado a la India. A ver si termina de una vez la dichosa crisis, aunque aquí en India los habitantes de Orissa, nunca oyeron esa palabra, no saben lo que es. A veces pienso si no somos nosotros los equivocados, quizás aquí la gente es feliz con lo que tiene y su forma de vida.

(Fin de la crónica)